Cada día estamos más cerca de que comience todo el movimiento de plantillas que vienen con el Draft, al comienzo del nuevo año en la NFL, sin embargo, antes de ello, podemos hacer un repaso respecto a lo ocurrido en la temporada pasada con algunos jugadores que si bien no tuvieron malas actuaciones, tampoco cumplieron con las espectativas…
Buffalo Bills
A.J. Epenesa, ala defensiva
Como novato, Epenesa solamente participó en el 27 por ciento de las jugadas defensivas de los Bills. Seguro, hay tiempo de sobra, pero esperen verlo más involucrado en la defensiva durante el 2021.
Miami Dolphins
Tua Tagovailoa, quarterback
El quarterback de los Dolphins, en acción limitada, estuvo lejos de lo que mostraron los pasadores novatos de los Chargers y Bengals. Tampoco ayuda mucho que el head coach Brian Flores optó por sacarlo de juegos en situaciones de adversidad en lugar de dejarlo enfrentarla. Todo esto parece que ha desembocado en el hecho de que existe charla en torno a la posibilidad de que Miami lo busque reemplazar con Deshaun Watson.
Baltimore Ravens
Matt Skura, centro
La falta de confiabilidad en la posición de centro, con balones notablemente imprecisos, fue un fuerte talón de Aquiles para un cuadro de Baltimore que ya estaba sufriendo por no lograr compensar de manera efectiva el retiro de Marshal Yanda. Los Ravens requieren una solución inmediata en la posición de centro, y no son conocidos por invertir muchos billetes en agentes libres de renombre.
Pittsburgh Steelers
Eric Ebron, ala cerrada
La posición de ala cerrada es vital para una ofensiva profesional.
Ebron, quien firmó como agente libre con los Steelers esta temporada, luego de expresar públicamente cuánto deseaba jugar con Ben Roethlisberger, solamente inició nueve de los 15 partidos en que jugó, y atrapó 56 pases para 558 yardas con cinco touchdowns, números lejanos a su temporada de Pro Bowl del 2018. Además, tampoco estuvo inmune a la malaria de los pases dejados caer que afectó a Pittsburgh en el segundo medio de la campaña.
Tennessee Titans
Isaiah Wilson, tackle ofensivo
Wilson participó en solamente cuatro jugadas ofensivas en el año, y se metió en toda clase de problemas fuera del campo. El equipo le lanzó una advertencia, y lo último fue un mensaje en Twitter donde señaló que renuncia al fútbol americano como Titan, borrándolo después. Vuela para un puesto entre las peores selecciones en la historia del club.
Denver Broncos
Drew Lock, quarterback
Los Broncos entregaron las llaves de la ofensiva a Lock después de olvidarse de él durante los primeros dos tercios de la pasada temporada. Con una temporada baja completa como titular, y mucho ruido alrededor del club ensalzando sus cualidades de liderazgo, lo que entregó como resultado en el 2020 fue bastante malo. Denver hoy está ponderando la adición de un quarterback veterano mediante canje, y/o invertir su selección de primera ronda en otro pasador, porque Lock no dio muchas razones para sentir optimismo el año pasado, incluso después de un draft 100 por ciento dirigido para brindarle armas. Su tiempo no está agotado en Denver, pero corre riesgo.
Kansas City Chiefs
Le’Veon Bell, corredor
Bell acarreó el ovoide solamente 63 veces y atrapó 18 pases para los Chiefs en temporada regular, y en la postemporada tampoco fue factor, con dos acarreos sin recepciones.
Dallas Cowboys
Leighton Vander Esch, linebacker
Con un partido más que el año previo, por lesiones, Vander Esch acumuló 12 derribos menos y apenas media captura más que en el 2019. Además, por momentos era retirado del campo porque simplemente no estaba jugando a la altura, como muchos en la defensiva de Dallas. Parece ya lejano aquel 2018 de Pro Bowl para este linebacker.
New York Giants
Evan Engram, ala cerrada
Engram, quien se supone que es un atleta de élite, sigue entregando números pedestres en New York. Su 2020 consistió de 63 recepciones para 654 yardas y un touchdown, números muy lejanos de lo que marcaron tipos como Travis Kelce o Darren Waller, genuinos elementos de Pro Bowl en la posición.
Green Bay Packers
Equanimeous St. Brown, receptor abierto
St. Brown fue elegido una ronda más tarde que Marquez Valdes-Scantling en el draft del 2018, sin embargo, su progreso parece estar sumamente rezagado respecto a MVS. St. Brown inició apenas un juego del 2020, contrastando con los siete que inició el año previo, y atrapó siete envíos, una caída importante respecto a los 21 del 2019. No quepa duda de que la plaza de plantilla del producto de Notre Dame podría estar en riesgo a lo largo de las siguientes semanas de agencia libre y draft.
Tampa Bay Buccaneers
Chris Godwin, receptor abierto
Muchos pensamos que Godwin podría haber sido el jugador más beneficiado por la llegada de Tom Brady a Tampa Bay, pero en cambio, es posible que hayamos visto lo último del receptor abierto con los Buccaneers. Seguro, el equipo ha anunciado que le interesa retener los servicios del jugador de cuatro temporadas, pero simplemente no lució tan fino como el año previo. Seguro, se perdió cuatro partidos por lesión, pero los dos pases dejados caer en postemporada –junto a tres en campaña regular– dejan un sabor amargo.
Los Angeles Rams
Jared Goff, quarterback
Cuando eres el primer recluta global de tu equipo, y se deshacen de ti a cambio de tragarse un golpe contra el tope salarial de 22 millones de dólares, no queda de otra más que hablar de una temporada decepcionante. Tal fue el caso de Goff, quien vestirá los colores de Detroit a partir de la campaña que viene. Pese a que elevó su porcentaje de pases completos, también tiró su menor cantidad de pases de touchdown y marcó su menor promedio de yardas por intento de pase en una campaña completa de NFL. A sus 26 años de edad, sus números tendrían que estar tendiendo al alza, no a la baja.
San Francisco 49ers
Jerick McKinnon, corredor
Pudo alinear en los 16 partidos de la campaña regular, cuatro de ellos como titular, sin embargo, apenas logró 81 acarreos para 319 yardas, rara vez reflejando confianza por parte de los entrenadores. La inversión que hizo San Francisco en el corredor suplente de los Vikings –para convertirlo en titular de los Niners– fue de 30 millones por cuatro años, un salario bastante alto para la posición.