La Fórmula 1 esta semana, irá de un circuito rudo a otro, luego de abandonar Mónaco, donde Max Verstappen y Red Bull arrebataron el «gobierno» de los campeonatos a Mercedes y Lewis Hamilton.
Hamilton vivió un fin de semana de frustración luego de largar séptimo y quedarse ahí todo el tiempo. Tal vez el Gran Premio con peor ritmo de carrera para el inglés desde 2013, antes de la era híbrida y como en pocas ocasiones el piloto dejó claro todo su descontento.
Y ya que hablamos de la era de los motores que ha sido de total dominio de Mercedes, Red Bull logró por primera vez en siete años y cinco carreras colocarse al frente de las clasificaciones de pilotos y de equipos.
Pero Bakú no será necesariamente una extensión de la «gracia» de los Toros Rojos, porque esa pista, aunque callejera, es totalmente distinta a Mónaco.
En Bakú, los motores mandan y como se ha podido ver durante lo que va del calendario, no hay un equipo totalmente dominante, sino que depende del tipo de circuito que toque. Ahora, las cosas parecen mejor para Mercedes, líder en plantas de poder.
Red Bull debe estar más cerca que antes y con la aerodinámica que le da el alerón trasero que reduce la resistencia al viento en la recta (de casi dos kilómetros) y que lo mismo se transforma en un eficiente elemento en el agarre en curvas lentas, no sería raro que ahí peleen tanto Verstappen como Pérez.
Por si fuera poco, es una pista para pilotos que no tienen problema con estar a unos milímetros de un muro, como Max y Checo. Todavía está en veremos la protesta que piensa poner Mercedes por dichas alas, que FIA ha autorizado hasta ahora. Una lucha de poder más que de razón o justicia.
McLaren, con un paquete muy bueno más el motor Mercedes, también debe calificar bien adelante. La gran duda es si Ferrari, cuyo motor está falto de «cavallinos» podrá repetir la suerte de Mónaco. La probabilidad parece indicar todo lo contrario.
En la última contienda, Max Verstappen iba por todo y lo tomó. Luego del efímero primer lugar de salida de Ferrari, todo lo que tenía que hacer era poner en paz a Valtteri Bottas y lo logró para terminar llevándose el podio, de manera espectacular.
Por otra parte y para el próximo circuito, hay que tomar en cuenta que nunca ha subido al podio en Bakú y no es su pista favorita (al menos eso dijo la semana pasada), de cualquier manera acumula tres segundos lugares y dos primeros en la temporada, para seguir en el liderato necesita algo similar.
Pero Checo Pérez tampoco se va a dar por vencido tan fácilmente. La calificación es todavía su lado flaco, pero los domingos tiene ritmo de podio. Mónaco fue la muestra de que puede poner ese paso, porque ya urge un podio.
Contrario a Verstappen, Bakú es una pista que se le da bien a Checo. Dos veces tercero con Racing Point-Force India y siempre ha calificado bien. Además es un lugar donde hay varias oportunidades de rebase.
Por último, pero no de menor importante, obviamente no nos podemos olvidar de Lewis quien, es magnánimo, simpático, platicador y muy atento… cuando gana. Cuando pierde es porque el equipo hizo mal las cosas, no él. Lewis corre para el Hamilton Racing Team, no para Mercedes… o al menos así se sintieron las cosas en Mónaco.
Estamos seguros que regresará más encelado que nunca. ¿Cómo que no es líder de la clasificación? Además Mercedes debe tener un mucho mejor desempeño en Bakú.
Con este panorama y los ánimos de los pilotos al límite, todo es posible, estaremos muy pendientes de cómo cambian o permanecen los lugares en el marcador.
Posteriormente, la siguiente fecha en el calendario, se llevará a cabo del 18 al 20 de Junio.