Después de completar las actividades organizadas del equipo y dos días del minicampamento obligatorio de los Dallas Cowboys, el quarterback Dak Prescott se pronunció oficialmente de regreso de una dislocación y fractura compuesta en el tobillo derecho que le obligó a perderse 11 partidos del 2020.
«He enterrado la lesión», dijo Prescott después de la práctica del miércoles. «Honestamente, chicos, ustedes me conocen, desde el punto de las prácticas, desde el punto de simplemente seguir adelante y seguir con mi vida, la he enterrado mentalmente. Y pienso que ustedes y muchas personas a mi alrededor me deben ayudar a enterrarlo también, para seguir adelante».
Prescott incluso puede señalar con precisión el día exacto en que dejó de pensar en el tobillo.
«Tuve un buen Cinco de Mayo, fue un poco activo y en ese tiempo quizás hice algunos movimientos de baile y me sentí listo», dijo Prescott. «Así que ese fue el momento en que me dije en la cabeza, ‘La lesión se ha ido'».
Prescott sufrió la lesión en el tercer periodo de la victoria de la Semana 5 de los Cowboys sobre los New York Giants el pasado 11 de octubre. Se sometió a una cirugía esa noche y una cirugía subsecuente en diciembre que no estuvo relacionada al dislocamiento.
Mientras que la rehabilitación de Prescott ha resultado bien, todavía debía esperar para ver lo que podía hacer sobre el campo durante el programa de receso de temporada. Fue marginado únicamente del trabajo de 11 contra 11 para no tener que lidiar con defensivos o linieros ofensivos cayendo cerca de sus piernas.
«Simplemente saber que podía realizar todos los retrocesos, escapar de la presión cuando necesitara», dijo Prescott. «Estoy seguro que ustedes han visto el ejercicio de escapar de la presión que hemos hecho algunas veces. Ese fue importante para mi confianza, simplemente ser capaz de girar y voltear a la izquierda, a la derecha, cambiar de dirección, no sentir nada y luego revisar el video y percatarme de que día a día voy corriendo más fluido. Voy mejorando, empleando mis piernas más cuando lanzo. Son solo los bloques de la base, los escalones, para poder llegar a donde quiero. Es emocionante».
El martes, el head coach Mike McCarthy dijo que anticipaba a Prescott participando en todas las porciones de las prácticas una vez que comenzara el campamento de entrenamiento en julio, pero que el equipo sería inteligente y escucharía al quarterback si requiere un día libre o recortar el trabajo.
«Sea entrenar aquí, entrenar con nuestros chicos o dirigirme a California para tener más trabajo posicional», dijo, «Haré todas las cosas necesarias para, como he dicho, estar en la mejor forma posible de cara al campamento de entrenamiento».
A Prescott se le pronosticó un plazo de recuperación de cuatro a seis meses al tiempo de la lesión. Sus compañeros se maravillaron por el modo en que atacó su rehabilitación, incluso después de firmar un contrato por cuatro años y 160 millones de dólares el inicio del receso de temporada. Ha sido una presencia regular en The Star para su rehabilitación y entrenamientos, además de seguir trabajando con su coach personal de quarterbacks. Seguirá lanzando a receptores y corredores antes de que inicie el campamento de entrenamiento, pero ahora con un pequeño descanso.
